Lo admito. Lo soy
y tengo un problema. Todos los tenemos. Ilusiones. Promesas. Qué más da. Nada
es real. Nada es verdadero. Los “para siempre” salen mal y han dejado de
existir. Porque nada, nada, en esta vida es para siempre. Ni el amor, ni la
amistad, ni la familia. Nada. Todo se desgasta con el tiempo. D
Las promesas no se
cumplen, los amores ya no son verdaderos, las palabras no son ciertas.
Innecesarias. Ilusa. Eso es lo que soy. Lo que somos. Nos mueve la fe y la
esperanza. Mentiras. Falsedades.
Demasiados obstáculos
para que algo funcione. Los amigos no estarán hay siempre, jamás. Porque nada,
nada, es para siempre. No merece la pena vivir la vida intentando construir un
futuro. Cuando sabemos que todo se torcedera. A lo mejor ni siquiera llegamos a
un futuro. ¿Vivir el presente? ¿Para qué? No merece la pena. Lo positivo se va
extinguiendo. Imposible. Impensable.
Demasiadas “Una
segunda oportunidad” ¿Para qué? ¿Para volver a sufrir cuando te fallen otra
vez? No lo innecesario se corta desde las raíces .Y yo soy de esas. Ilusas.
Demasiado. Creo en cosas que sé que jamás llegaran, que jamás sucederán. Que fe
tengo! Jajaja me rio de mi misma. La vida traiciona, la gente traiciona.
Demasiadas despedidas para tan pocos saludos. Innecesaria. Esa parte de mí que
me permite soñar. Que me anima a soñar. Hasta que aterrizas. Y te das cuenta de
la mierda de la vida. De lo mal que va el mundo. De que quizás no puedas
aspirar ni a la mitad de lo que querías ser. Y que te han decepcionado.
Fallado. Dolido. Arañado. Para darte cuenta de que no merece la pena vivir
sufriendo. Porque los sueños no existen, las promesas no existen, los para
siempre no existe, el amor no existe, la amistad se pierde, el futuro se
destroza y la vida se consume. Constantemente .Dolorosamente, Perdiendo el
tiempo viviendo la vida…
Ilusas también nos llamamos ingenuas o soñadoras. O simplemente.Estúpidas.
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